¡Oh Islandia! Ese pequeño país del que no escuchamos noticias muy seguido y que probablemente muchos no podrían ubicarlo en un mapa, aún así esa nación nos ha deleitado con una extensa propuesta musical de diversos géneros que otros países más grandes seguramente envidian. De Islandia nos ha enamorado la melancolía de Sigur Rós, la influencia folk de Of Monsters And Men, la extravagancia de Björk y, por supuesto, la propuesta electrónica de GusGus que en esta ocasión presenta un disco con un título que a nosotros nos encantó y por el cuál les damos las gracias, me refiero a Mexico.
Su noveno álbum en casi veinte años de existencia nos presenta una música electrónica muy fácil de digerir y es excelente para los que, como yo, no somos muy fanáticos del EDM y sus derivados, un disco que suena a «precopeo de viernes por la tarde» en el que la continuidad entre las canciones no deja notar cuándo empieza una canción y termina la otra.
Si hay algo característico de GusGus es el hecho de que su alineación cambia constantemente, pero hay dos miembros que siempre ha estado ahí: Stephan Stephensen y Birgir Þórarinsson, sin duda son ellos los que han mantenido a la banda en un mismo camino y el resto de los miembros los que refrescan el sonido y aportan algo nuevo.
A pesar de que este álbum tiene canciones muy parecidas entre sí hay algunas dignas de destacar, como Obnoxiously Sexual que tiene un beat pegajoso, violines ocasionales y el regreso de Daníel Ágúst Haraldsson como vocalista principal.
El clímax definitivo es Mexico, más de seis minutos de exploración de beats sin letra que para rematar tienen el nombre de nuestro país, a esta canción le sigue This Is What You Get When You Mess With Love la más tranquila y corta que hace un buen contraste con el resto del disco. En general es una obra digna de mezclarse y crear nuevas versiones de la mayoría de las canciones, un lienzo que comenzó a ser pintado y dio espacio a que otras personas lo terminaran a su manera.
Desde que se anunció el título del disco muchos de nosotros vivíamos esperanzados con una probable visita de los islandeses a nuestras tierras y afortunadamente vamos a poder armar la fiesta con ellos y escuchar lo mejor de Mexico en el próximo Corona Capital que está más cerca de lo que parece.
