Si hay un momento histórico que se ha explotado hasta el cansancio en la gran pantalla es la Segunda Guerra Mundial, sin embargo es un tema que se ha explorado desde perspectivas distintas y ha permitido conocer vidas fascinantes, una de ellas ha sido sin duda la de Alan Turing.
Alan Turing es un héroe prácticamente anónimo que evito la muerte de miles de personas y fue un personaje clave para finalizar la guerra, también se considera el inventor de la primera computadora. El Código Enigma es la biopic encargada de contar su historia. Primero que nada es necesario aclarar que una biopic no es más que una aproximación a la historia, adaptada (obviamente) para fines comerciales, porque (obviamente) la persona real no tenía como propósito hacer que su vida fuera la cima de la taquilla internacional.
La película, dirigida por Morten Tyldum, cuenta con actuaciones excelentes. Benedict Cumberbatch tuvo la misión de interpretar a Alan Turing, si bien su actuación enchina la piel, en momentos no se puede evitar relacionarla con otro de los papeles más conocidos del actor: Sherlock Holmes. Merecida la nominación al Oscar que recibió Cumberbatch. El reparto en general hace un gran trabajo, se destaca también el trabajo de Keira Knightley.
El Código Enigma explora la manera en la que un equipo de británicos expertos en descifrar códigos se enfrentan a Enigma, la máquina que transmite los mensajes codificados de los alemanes, todo esto como parte de una misión ultra secreta. Alan Turing se da cuenta de que para vencer a una máquina sólo hace falta crear una máquina más poderosa y es ahí cuando comienzan los problemas. Otro de los puntos a favor que tiene este filme es que aborda temas tan complejos como la homosexualidad en tiempos de guerra y la manera en que, sin importar los avances que haya ofrecido a la humanidad a través de la ciencia, una persona homosexual estaba condenada a la soledad y a la incomprensión.