Islandia es uno de los mayores productores de indie rock del mundo. Ese país frío y nórdico nos ha regalado grandes promesas musicales, un ejemplo es Of Monsters And Men, una banda angloparlante. Beneath The Skin es apenas el segundo álbum de esta banda y parece que los liderados por Nanna Bryndís Hilmarsdóttir ha seguido un buen camino.
El disco conjuga canciones melancólias y canciones llenas de energía. Algunos de estos tracks se perfilan para ser grandes éxitos. El principio, con interesantes percusiones en Crystal, hace imaginar un ejército preparado para la acción, la aparición de la dulce voz de Nanna parece contradecir la escena. Entre los sentimientos que más transmite el álbum está sin duda la esperanza. Este material sin duda es de esos que te hacen creer que eres capaz de todo y ¿a quién no le gusta sentir eso?
La segunda canción, titulada Human, nos deja escuchar otra tierna voz, esta vez es la de Ragnar Þórhallsson. El chico realmente tiene una voz bonita, la combinación de ésta con la voz de Nanna son un combo muy relajante. Los rasgos folk de la banda se hacen presentes de forma más sutil que en su disco debut. Probablemente la canción más destinada al éxito comercial y a quitarle a la banda el título de one hit wonder (ganado a pulso con Little Talks de su álbum pasado) sea Empire.
El momento melancólico comienza desde Organs y continúa hasta Thousand Eyes. A pesar de que se trata de un disco largo (trece canciones que exceden los cuatro minutos) es relajante e inspirador. Se inspira en la naturaleza y puede recrear un paisaje nórdico en la mente de quien lo escuche. Ya para la recta final parece que la esperanza va desapareciendo para dar paso a la nostalgia. En general es un álbum que muestra el estilo definitivo que la banda comenzó a construir desde My Head Is An Animal (2011) y, aunque es muy similar a su trabajo anterior y la experimentación es nula, es un álbum apropiado para tener un momento de calma.