En el año 2000, New York era testigo de una escena creciente de actos alternativos. The Strokes ya tenía un par de años como banda, Interpol lanzaba su EP homónimo, Yeah Yeah Yeahs comenzaba con su prolífera carrera. Pero en un plano mucho más discreto, cuatro jóvenes de Merrick decidieron formar Brand New.
La agrupación liderada por Jesse Lacey destacó inmediatamente por un sonido derivado del emo, avanzando en vertientes del indie y el post-hardcore. El resultado fue Your Favorite Weapon (2001), un golpe de canciones adolescentes, describiendo las típicas situaciones de manera poco más cínica a la normal. Jude Law and a Semester Above, sencillo extraído del material, dejaba claros los característicos títulos crípticos de su primera etapa.
Tras experimentar un éxito moderado con su primer álbum, y de comenzar una batalla con los contemporáneos Taking Back Sunday (un escándalo jugoso que involucra infidelidades), Brand New decidió una aproximación más madura al género. En 2003, Deja Entendu sorprendió a fanáticos y crítica con letras profundas sobre miedo, muerte, paranoia y la culpa por lastimar a alguien. Se desprenden de aquí auténticos hits como The Quiet Things that No One Ever Knows, Sic Transit Gloria… Glory Fades, y Okay, I Believe You, But My Tommy Gun Don’t (referencia de Home Alone).
Tras llegar a la cima de la escena emo emergente, y liderando toda una generación de bandas que nunca lograron imitar su balance de elementos, Lacey y compañía firman con Interscope, y preparan entre el más absoluto secreto The Devil and God are Raging Inside Me (2006), un disco que toma su nombre de una conversación con Daniel Johnston, y que supuso el punto más alto en la carrera de los neoyorkinos.
Su fórmula tradicional cambia de los ritmos de pop-punk y los gritos ocasionales a canciones reflexivas, altamente introspectivas sobre temores muy profundos, con ritmos tranquilos y explosiones repentinas. La evolución total que alcanzaron los llevó a tours con los legendarios Thrice, y a ser comparados favorablemente con Radiohead.
Sería hasta 2009 que Daisy, su cuarto material de estudio, vería la luz del día. Sin embargo, comienza en este punto la repetición de temas, y las decisiones en el estudio de volver las canciones impredecibles terminan afectando el disco. Pese a ser considerado un buen intento por los críticos, Daisy no logró el impacto de sus predecesores, y fue descrito por Lacey como “el fin del camino” que los llevaría a regresar por sus pasos para buscar un nuevo estilo.
Luego de un largo periodo de silencio, en 2014 se anunció que la banda se encontraba escribiendo cosas nuevas. Un año después, el booklet atrasado de The Devil and God Are Raging Inside Me llegaría finalmente a los fans, junto con una postal que decía “RIP 2018”.
Desde ese momento, se temió una separación anunciada junto con un último álbum. Hasta el día de hoy, se han lanzado dos tracks de dicho material, y la agrupación continúa en una extensa gira. Pero recientemente llegó a su tienda merch que recuerda su fecha de muerte. “RIP 2000-2018”, nos indica este epitafio adelantado. Por si fuera poco, en 2015, Lacey anunció durante un concierto en Tennessee que ellos no durarían mucho más, y que se sentían agradecidos por todos los que seguían ahí.
Sus fans no tenemos miedo de su muerte, pero tememos un poco lo que venga después. Si resulta que los rumores de su separación son ciertos, el mundo perderá a uno de los máximos exponentes de un género que se renueva constantemente. Sin embargo, el material que nos dejan es un testamento importante, y su música resonará igual de fuerte en futuras generaciones.
Larga vida a Brand New.